Cebolla

Contiene Fósforo, Hierro y Calcio y vitaminas del Complejo B y vitamina C. Ayuda al organismo contra infecciones, elimina sustancias tóxicas por los riñones, que resulta en sales minerales. El caldo de cebollas hervido con miel es bueno para resfriados, gripes, tos, bronquitis y asma. Abre el apetito, controla las enfermedades del estómago, es óptima contra el estreñimiento, hinchazón, problemas de piel, garganta, huesos, intestino y es diurética. Rica en elementos contra la infección. Es el peor enemigo de los gusanos en el intestino. Elimina sustancias tóxicas a través de los riñones. Estas propiedades se pierden cuando la cebolla es cocida. Cruda, colocada debajo de la nariz, corta sangrados nasales. El jugo de cebolla es muy bueno para las picaduras de arañas, abejas y avispas. La cebolla también previene el infarto. Para quienes sufren de acidez en el estómago la cebolla cruda no es recomendada. La cebolla no tiene grandes problemas a la hora de la compra. Los únicos cuidados son: verificar la consistencia, coloración y brillo de la cáscara. Para evitar irritación en los ojos cuando se corta una cebolla, basta colocar en la punta del cuchillo un pedazo de pan (él quita buena parte del olor), o bien, coloque la cebolla en la heladera por unos 10 minutos. Su período de cosecha es de septiembre a marzo.